Los cólicos del lactante son un problema común que pueden causar mucha angustia tanto al bebé como a los padres, estos cólicos se caracterizan por un llanto inconsolable y persistente que suele ocurrir en las últimas horas de la tarde o la noche. Aunque no se conoce la causa exacta de los cólicos del lactante, se cree que pueden estar relacionados con el sistema digestivo inmaduro del bebé, la intolerancia a la lactosa, el estrés y la ansiedad.
El tratamiento de los cólicos del lactante puede variar dependiendo de la causa subyacente y la gravedad de los síntomas. Se recomienda el tratamiento de fisioterapia con masajes abdominales específicos para aliviar al bebé. Este tipo de masaje puede ayudar a liberar el gas y las heces atrapadas en el intestino y mejorar la función intestinal, o el gas atrapado en la cavidad torácica mediante la movilización del diafragma, que puede ayudar a reducir la tensión en el abdomen. Suele ser un tratamiento muy efectivo que calma los dolores del bebé y le ayuda a mejorar la movilidad digestiva, intestinal y la eliminación de las heces.
Además, hay algunos cambios en la alimentación del bebé que pueden ayudar a aliviar los cólicos. Por ejemplo, puede ser útil reducir la cantidad de aire que traga el bebé durante la lactancia, por lo que se recomienda que el bebé se alimente en una posición vertical y se asegure de que el pezón o la tetina del biberón estén bien colocados en la boca del bebé.